Test Reforma Laboral

Algunos conceptos que puede que no estén claros para mucha gente.

Imaginaos que una empresa A, libremente en un mercado libre, ha firmado un contrato de suministro con una empresa B por 1000 unidades de un producto a un precio unitario de 3.000 euros. Imaginaos ahora que de la empresa B llamen a la A y digan:

"Oye Manolo. Llamo porque mira, que nos hemos aquí el departamento de compras con dirección, y hemos decidido que como últimamente estamos facturando menos, pues que es absurdo que paguemos a los proveedores como antes, que hay que ser solidarios en las pérdidas y repartir el apretado de cinturón. Así que mira, hemos decidido lo siguiente. No te preocupes que no te llamo para cancelar el contrato. Te llamo para decirte que seguimos comprándoos a vosotros, pero que en vez de a un precio unitario de 3.000 euros a partir de ahora os vamos a pagar 2.000. En cambio, como ese precio ya nos mola mas, pues que sepas que pasamos a considerar que tu no te has comprometido a suministrarnos 1.000 piezas a ese precio, sino que estas comprometido a suministrar 1.500. Por cierto, nada de un volumen de suministro máximo de 154 al mes, pero apáñatelas porque vamos a necesitar 168 al mes." "¿Estafa? Por favor Manolo ... Sabes muy bien que la recién aprobada reforma del código mercantil nos da el derecho a hacerlo, y que si no estas de acuerdo también establece que independientemente de la indemnización acordada por incumplimiento de contrato nos permite indemnizarte sólo con una cantidad mucho menor."

Qué pensaría el empresario de A. ¿Que tiene la desgracia de vivir en una república bananera, y con semejante inseguridad jurídica en el mundo de los negocios es imposible que un país prospere? Pues mira, estaría completamente de acuerdo con él.

¿Y sabes la única diferencia? Que la empresa A se llama en realidad Pedro Pérez, las unidades a suministrar son horas de trabajo, y que el contrato no es mercantil sino laboral. Lo cual no deja de significar que la seguridad jurídica ES la de una república bananera. Supongo que Pedro Pérez debería de asumir que vive en la República Bananera de España, y en vez de rebelarse, debería ir aprendiendo a besarle el culo a su señor, que tiene a bien darle de comer.